INVITADA DE VERANO ¡Y DE OTOÑO!

¿Llevas ya unos meses de boda y la cosa no tiene pinta de parar hasta diciembre? Entonces, tus dotes para no repetir look de invitada, tarde o temprano, van a llegar a su límite. Porque nadie tiene carrete infinito para ingeniar outfits completamente diferentes, por mucha ilusión que te haga que se case media pandilla de la uni y parte de la del colegio. Los malabares fashion tiene su tope, y cuando empiezas a sentir tentaciones de tirar de la improvisación de última hora (eufemismo de ‘puro azar’), hay que tomar cartas en el asunto. Sobre todo, si lo de comprar modelito por boda no entra dentro de tus planes. Por eso, como a nosotr@s tampoco nos gusta la idea de cerrar el año con la hucha vacía, te proponemos estilismos reciclables. Básicamente, los que te puedes poner en la boda del finde que viene con unas sandalias, y en noviembre con medias y abrigo de pelo sintético sin que nadie lo note. Jugada maestra.